Lux Machina presenta un programa de obras para percusión en diálogo con vídeo,

electrónica y luz. Las piezas comparten un lenguaje visual y sonoro que oscila entre la estética minimalista y el noise, con influencias de artistas como Ryoji Ikeda y Thomas Renoldner. En este concierto, lo visual no es un mero acompañamiento: es una capa indispensable sin la cual la música no existiría. Imágenes generadas por ordenador, ritmos mecánicos sincronizados con proyecciones y una iluminación precisa amplifican la música, generando una experiencia inmersiva. Las tecnologías digitales forman parte inseparable de nuestra vida cotidiana. Pantallas, algoritmos y flujos de datos configuran nuevas formas de percepción y comunicación. En Lux Machina, estas herramientas se convierten en un puente cultural que refleja códigos compartidos y vivencias comunes.